La Personería de Bogotá le dio la razón al Colegio Médico de Cundinamarca y Bogotá, que el pasado mes de noviembre había advertido sobre el riesgo que corrían los pacientes en el Distrito Capital frente a la estrategia desarrollada en subredes de servicios de salud en la que con el acompañamiento de tres o cuatro médicos generales asignados, bajo la supervisión de un especialista, asumen una consulta de carácter especializado, supuestamente para aumentar la cobertura y atención.
Luego de que desde el año pasado la Federación Médica Colombiana se pronunciara rechazando lo que se denominó ‘consulta asistida, multiconsulta o consulta en espejo’ que fue avalada por el Ministerio de Salud y Protección Social, ayer se conoció el informe de la Personería de Bogotá en el que advierte que en los puntos de atención de las subredes norte y suroccidente se están realizando consultas por parte de profesionales en medicina que no cuentan con los títulos en las diferentes especialidades.
Igual que lo había advertido el gremio médico, para la Personería, hay normas de talento humano en salud que prohíben ejercer competencias por parte de profesionales no autorizados.
Según el Ministerio Público de orden local, serían dos las subredes de Bogotá que estarían exponiendo a los usuarios a riesgos innecesarios, debido a posibles faltas en las que estarían incurriendo los médicos de esos centros de atención.
En estos puntos de atención, las consultas especializadas son realizadas por médicos generales, procedimiento que, para la Personería, podría ir en contra de la salud de los pacientes e infringe las normas del Sistema General de Seguridad Social en Salud.
El informe considera que los médicos de estas subredes estarían incurriendo en faltas de orden ético, porque aunque son profesionales, no cuentan con el certificado de especialistas, que es lo que requiere el paciente y por lo tanto que no se garantiza que tengan la capacidad de resolver los problemas que necesitan los usuarios.
“Estas consultas las están realizando médicos generales que no cuentan los certificados o acreditaciones de especialista. Esto pone en grave riesgo la vida y la integridad de los pacientes de forma injustificada, desconociéndose con ello la normatividad que rige el sistema nacional de salud”, manifestó la personera distrital, Carmen Teresa Castañeda.
Médicos ya se habían pronunciado sobre el tema
Las agremiaciones médicas que ya habían advertido sobre esta anomalía indicaron en su momento que “los programas de especialización en medicina, corresponden a posgrados médico-quirúrgicos intensivos, de alta exigencia, en los cuales durante tres o cuatro años, el especialista en formación adquiere conocimientos profundos en el área, sobre la anatomía, fisiología, la prevención, los cuidados pre y posoperatorios, las infecciones quirúrgicas, el tratamiento de complicaciones y la rehabilitación de sus secuelas. No es un aprendizaje que se adquiera en una capacitación de unas pocas horas o semanas”.
Y añaden que “la adquisición del título de especialista, es una exigencia insoslayable que soporta la garantía que el Estado da a los pacientes de la formación académica idónea del profesional”.
Las agremiaciones médicas ya habían solicitado tanto al Ministerio de Salud como a la Superintendencia Nacional de Salud que se pronunciaran sobre el asunto de marras y se aplicara lo que establece la Ley en cuanto a la calidad e ideneidad profesional, lo cual requiere que el personal de salud sea adecudamente competente desde el punto de vista técnico y científico.
Además de esta alerta, la Personería también indicó que la situación podría derivar en temas éticos e incluso legales, debido a que los contratos suscritos por los profesionales de las dos subredes no especifican que los médicos generales prestar el servicio en áreas que requieren especialidad, y tampoco que tengan que brindar atención a usuarios en este tipo de consultas.
Frente a este panorama, la Personería solicitó a la Secretaría de Salud que habilite todos los servicios especializados, e indicó que la alerta es una oportunidad para que, junto con el Ministerio de Salud, se implementen programas de estímulos e incentivos para que los profesionales se formen en alguna especialidad. A la solicitud, la Secretaría de Salud respondió que conformará dos comisiones, para enviar a cada una de las redes cuestionadas, que investigarán la situación que denuncia la Personería para consolidar un pronunciamiento al respecto.
Los centros médicos que hacen parte de estas subredes son los hospitales Pablo VI Bosa, del Sur, Bosa, Fontibón y Occidente (suroccidente) y los hospitales de Usaquén, Chapinero, Suba, Engativá y Simón Bolívar (norte).