En el Decreto 2702 del 2014, el Gobierno nacional fijó las condiciones de habilitación financiera de las Empresas Promotoras de Salud (EPS), estableciendo un nuevo régimen de patrimonio y reservas técnicas que debían cumplir para dar cumplimiento a los estándares de habilitación, en donde algunas EPS debían adoptar un plan de reorganización institucional, que en algunos casos conllevaría el cambio de la figura jurídica como el caso de las empresas de economía solidaria que se convirtieron en sociedades por acciones y en el caso de las cajas de compensación a escindir sus programas de EPS para conformar sociedades anónimas.
En su artículo 9 dicho Decreto estipulaba que esas EPS “debían cumplir en un plazo de los siete años siguientes a la fecha de entrada en vigencia del decreto con los requisitos financieros de capital mínimo, patrimonio adecuado, e inversión de las reservas técnicas.
Transcurridos cinco años desde el plazo dado, hoy a varias EPS pese a los avances que han podido mostrar, les ha sido negado el plan de reorganización empresarial y consiguiente capitalización porque no eran viable técnicamente o porque los socios que se incorporaban a las sociedades no garantizaban solvencia para estabilizar las finanzas de la EPS o por no convencer a la Superintendencia Nacional de Salud.
Cajacopi
Recientemente la EPS de la Caja de Compensación Familiar Cajacopi, que cuenta con 1’050.000 afiliados, recibió su actualización del certificado de habilitación por parte de la Superintendencia Nacional de Salud.
Sin embargo, su plan de reorganización, que contemplaba la escisión de la EPS de la caja matriz, le fue devuelto por la Supersalud, pues a estas alturas y casi para vencerse el plazo otorgado por el Gobierno, no tiene plan de reestructuración y su permanencia en el mercado es cuestión de preocupación para sus directivos.
LA EPS Cajacopi soporta un proceso de intervención del pasado, cuando fue saneada financieramente, pero ha vuelto a tener unos pasivos de 97 mil millones de pesos, respaldados por unos activos de 142 mil millones de pesos, lo que arroja un patrimonio positivo de 46 mil millones, pero no tiene su plan de renovación.
A esto se suma el escándalo en que se ha visto envuelta tras la captura de su director médico nacional Javier Peña Ramírez en la Operación Quirófano por parte de la Fiscalía General de la Nación y ha recibido numerosas denuncias por un aparente “robo” de afiliados.
Saludvida
Para su plan de reestructuración, la EPS Saludvida contemplaba la creación de una nueva sociedad pero sin garantizar el pago de los pasivos. La figura jurídica que emplearía SaludVida EPS, para cumplir con los requerimientos de habilitación financiera del Decreto 2702 del 2014, era la escisión de la sociedad, lo que implica la cesión de activos, pasivos, patrimonio y afiliados. La naciente empresa Nueva Salud Vida tendría la forma legal de una sociedad anónima simplificada, con un capital autorizado de 31 mil 400 millones de pesos.
Sin embargo, con 1’121.000 afiliados, su panorama no es el mejor porque su patrimonio negativo es de 730 mil millones de pesos con solo 362 mil millones de activos para respaldar un billón de pesos de pasivo.
Barrios Unidos de Quibdó
En el caso de Barrios Unidos de Quibdó con 790 mil afiliados le fue también negado el plan de reorganización institucional y le fue suspendida la habilitación para funcionar en los departamentos de Valle del Cauca, Magdalena y Córdoba, a partir del primero de agosto.
Según la Supersalud Ambuq no cumple los indicadores de los componentes financieros, técnico – científicos y jurídicos lo que genera un riesgo en la prestación de los servicios de salud a la población afiliada. Y tiene dificultades en temas de cobertura y atención integral a sus afiliados para especialidades básicas de pediatría, cirugía general, medicina interna, ginecobstetricia y obstetricia hospitalaria.
Además mantiene un patrimonio negativo de 243 mil millones de pesos y una siniestralidad del 99%, lo que aumentaría en los próximos años las pérdidas y por ende su patrimonio negativo
Vale decir que esta EPS adicionalmente ha sido salpicada con supuestos vínculos de sus directivos con paramilitares.