Senador Honorio Henríquez reveló que las Farc le han pedido al Gobierno un régimen excepcional de salud para la guerrilla, que no sea ni el subsidiado, ni el contributivo”.
A pesar de que en diciembre el Ministerio de Salud reglamentó por medio del Decreto 1937 del 2016 las condiciones para el aseguramiento en salud de los miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (Farc-EP), e indicó que los excombatientes entrarían a hacer parte del régimen subsidiado de salud, Pastor Alape, representante de la guerrilla, reveló a Confidencial Colombia que las Farc están solicitando la creación de un régimen especial de salud que cobije a sus miembros.
Al respecto, el senador del Centro Democrático, Honorio Heríquez, confirmó que las Farc está exigiendo un régimen excepcional de salud e indicó que, esto demuestra que “definitivamente la paz no es más que impunidad”. Asimismo, que tengan un régimen especial por medio de la ley 100, implicaría que no les cobrarían cuotas adicionales a los aportes de la ley, para la atención o tratamientos de los afiliados o sus beneficiarios.
Esta petición del vocero de las Farc, se basa en que muchos de los desmovilizados se reincertarán porque padecen problemas de salud específicos, y en vista de la crisis de salud por la que atraviesa Colombia, temen que no reciban el tratamiento adecuado, sí son afiliados al régimen subsidiado de salud. Y según reveló Confidencial Colombia, Alape dijo que requieren de un “régimen concreto que pueda cubrir las situaciones médicas de todos los integrantes de las Farc”.
Según el decreto vigente, todos los excombatientes tendrán derecho de salud por medio de la atención en el régimen subsidiado, a través de Nueva EPS, siempre y cuando no reunieran las condiciones para pertenecer al régimen contributivo.
Por otro lado, sí bien el anuncio del Ministerio expresa la voluntad del Gobierno de garantizar los servicios de salud a 6.700 excombatientes y unos 8.000 milicianos de las FARC–EP , por ahora en el régimen subsidiado, al reto de la entrada por primera vez al sistema de salud, ahora se suman las intenciones de que estén cobijados por un nuevo régimen.
Cabe resaltar que, muchos de los excombatientes probablemente ya están afiliados, pero aparecen con un nombre distinto a su verdadera identidad. Por lo que otro de los desafíos que implica garantizarles el acceso tiene que ver con el problema de identidad de los afiliados exguerrilleros, el cual deberá ser trabajado por el Ministerio de Salud, de la mano de la Registraduría de la Nación, para adelantar la labor que aparezcan con su nombre real para posteriormente publicar las novedades en el sistema.