La Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas (ACHC) adelantó una investigación en la que analizó la situación con ocho de los medicamentos más usados en servicios de Unidades de Cuidado Intensivo y servicios quirúrgicos.
De acuerdo con los resultados, el 72% de las IPS encuestadas reportaron que tienen escasez de Midazolam, el 46% de Ketamina, el 41% de Fentanil, el 40% Propofol, el 38% de Remifentanil, el 24% de Metadona, el 21% de Morfina y el 19% de Hidromorfona.
Pero, además, en esta misma encuesta advierten que en las oportunidades que se logran conseguir estos medicamentos, los costos de adquisición de algunos se han incrementado considerablemente.
Por ejemplo, el Fentanil aumentó en un 95%, el Midazolam en 81% y el Propofol en 74%, para el resto de los medicamentos, aunque han existido alzas, estas se han dado en un rango entre el 5% y el 38%.
Por esta razón, Juan Carlos Giraldo, director de la ACHC, pidió al Ministerio de Salud y al Invima explorar con la industria todas las opciones posibles para aumentar la provisión adecuada de estos medicamentos y sugirió tomar medidas como la declaratoria de vital no disponible, en los casos que sea posible, y adoptar medidas que controlen y eviten la especulación en los precios de estos medicamentos.
Reveló además que en medio de la pandemia por Covid-19, el gasto para los hospitales y clínicas en elementos de protección personal se incrementó en 2020, en promedio 163 % respecto al año anterior.
Estos gastos, en su mayoría, fueron asumidos por las instituciones hospitalarias, pues el 72 % del gasto ha sido asumido por las clínicas y hospitales con su patrimonio. Otro 9,2 % de la inversión en estos elementos se obtuvo por donaciones y 9,2 % por el gasto del gobierno. Las ARL solo contribuyeron con un 7,5 %.