El Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), aprobó el ingreso al país del primer biosimilar, se trata del Adalimumab, para el tratamiento de enfermedades complejas, como artritis reumatoide, enfermedad de Crohn y psoriasis.
Según el Ministerio de Salud y Protección Social, de 10 de los medicamentos más recobrados del sistema de salud, 8 son de origen biológico y son destinados, principalmente, al tratamiento de enfermedades complejas.
Además de tener por lo menos dos competidores por cada uno de los 8 fármacos más recobrados, el sistema podría liberar recursos por aproximadamente de 600.000 millones de pesos, por lo que el ingreso de biosimilares al país representa un aporte importante a la sostenibilidad financiera del sistema.
Hace un par de semanas ya el Invima había anunciado que después de muchos años de discusiones, le dio luz verde al primer medicamento biosimilar contra el cáncer en Colombia. El trastuzumab, usado para el cáncer de mama, saldría al mercado bajo el nombre comercial de Ogiviri. Su aprobación implicaba, en otras palabras, la apertura de un mercado que ayudará a aliviar los aprietos financieros del sistema de salud.
Diferencias entre medicamento biológico y un biosimilar?
Los medicamentos biológicos (hechos con biotecnología) tienen tres características: son producidos utilizando células vivas, son moléculas grandes y complejas parecidas a las que produce el cuerpo humano y normalmente son inyectables.
Se producen en “laboratorios vivos” utilizando microorganismos o células cuyo ADN se ajusta para tratar, curar o prevenir enfermedades. La base de su elaboración es la ingeniería genética.
Al entrar en contacto con el cuerpo humano actúan sobre una o varias proteínas asociadas a una enfermedad (dianas), que genera un cambio en la forma como ésta opera, que favorece la salud del paciente. En ese sentido, los medicamentos biológicos son considerados de buena precisión y efectividad.
Un biosimilar es un producto biológico altamente similar a un producto biológico innovador ya aprobado, y que ha demostrado no tener diferencias clínicamente significativas con el producto de referencia. Los biosimilares son producidos una vez la patente del medicamento biológico innovador ha expirado.
Al ser los biosimilares igualmente medicamentos biológicos, su desarrollo requiere de experiencia, tiempo, capacidad científica y tecnológica, así como evidencia de su efectividad, lo que permite conseguir un producto de alta calidad y eficacia, al mismo nivel del producto de referencia.
“Recibimos con entusiasmo la noticia del ingreso de este primer grupo de medicamentos biosimilares a Colombia. Este paso, representa un gran avance para los pacientes colombianos que cada vez más requieren de tratamientos con calidad, seguridad y más efectivos para el manejo de sus enfermedades. Estamos convencidos que esta buena noticia ayudará a nuestro sistema de salud para que, a futuro, pueda reinvertir recursos en otros rubros como innovación, nuevas terapias e incluso infraestructura”. aseguró Gianfranco Biliotti, gerente general de AMGEN Colombia.
Al cumplir 5 años de presencia en Colombia, y con casi 40 años de experiencia, AMGEN, mantiene un liderazgo en el desarrollo de medicamentos innovadores para el tratamiento de enfermedades de alto costo y complejidad como la artritis reumatoide, cáncer de colon, enfermedad de Crohn, hipercolesterolemia, leucemia linfoblástica aguda, osteoporosis y psoriasis. Para los próximos años, la compañía espera presentar en Colombia sus nuevos avances en materia de oncología.