La elección de la fecha corresponde al natalicio de doctor Federico Lleras Acosta, médico veterinario, bacteriólogo e insigne investigador nacional nacido un 28 de abril de 1877. Fue quien fundó el primer laboratorio de Colombia en 1906 y por muchos años el único, además de ser un gran investigador de la lepra.
A propósito de estos profesionales, son los primeros en saber si el paciente que acude a hacerse algún examen específico presenta alguna afección, una tarea que a muchos no les cae en gracia, pero que a la vez forma parte de la labor emprendida por personas que hacen parte del sistema de salud o industrial. La conmemoración de esta fecha es de gran importancia para los bacteriólogos y quienes estudian para serlo pues, además de recibir un reconocimiento a su profesión, se les invita a ser comprometidos en el ejercicio de su labor.
En este día son habituales las conferencias y los conversatorios en torno a los retos y desafíos científicos en el área de la salud dentro de este contexto. Una de las principales preocupaciones de los bacteriólogos recae actualmente en las consecuencias de la hepatitis, enfermedad que afecta principalmente al hígado y que deja un saldo de casi 800 mil personas muertas al año.
Según el Colegio Nacional de Bacteriología, cada año se evitan entre 2 y 3 millones de muertes por la inmunización y aplicación de vacunas en enfermedades como el dengue y la hepatitis, entre otras, siendo una de las intervenciones sanitarias más eficientes y con mayor éxito de acuerdo a su costo.