El 3 de junio cuando se celebró el Día Internacional de la Fertilidad pretende alzar la voz sobre la importancia del cuidado de la salud reproductiva y pone en evidencia los problemas de fertilidad que suelen pasar desapercibidos y no son consultados con especialistas a tiempo.
Pese a ser aún un tema tabú para muchos en nuestra sociedad, la infertilidad es una condición médica que afecta a un número importante de la población de nuestro país y que se interpone en sus planes de tener hijos.
La OMS define la infertilidad como la incapacidad para lograr un embarazo clínico después de un periodo de 12 meses de mantener relaciones sexuales sin protección.
En Colombia, de acuerdo con la más reciente Encuesta Nacional de Demografía en Salud (ENDS), el 12,1% de las mujeres de 15 a 49 años que desean uno o más hijas o hijos han tenido problemas de fertilidad. Las causas asociadas a los problemas de fertilidad pueden tener múltiples orígenes, en ese sentido, siempre es determinante consultar con un médico especialista en fertilidad que pueda resolver cada caso específico.
Aun así, es posible identificar entre las posibles causas de la infertilidad alteraciones en los óvulos o espermatozoides, la forma del útero que no permite implantar un óvulo fecundando, enfermedades de transmisión sexual como la clamidia y la gonorrea no tratadas, entre otros motivos.
Adicionalmente también se reconocen como factores de riesgo para la fertilidad el sobrepeso, los tratamientos quimio y radioterapia, el sobrepeso, el consumo excesivo de tabaco, alcohol y drogas, y otras razones.
Es importante que la población además de estar al tanto de estos riesgos causantes de infertilidad, también reconozca la oferta de Tratamientos de Reproducción Asistida en Colombia y estén al tanto de su utilidad, no solo para parejas que enfrentan diagnósticos de infertilidad, sino para otras personas que deseen conformar una familia convencional o monoparental. Como respuesta a esto, en nuestro país es posible encontrar distintos Centros de Fertilidad agrupados por la Asociación de Centros Colombianos de Reproducción Humana (ACCER), en la página www.planm.com es posible consultarlos para mayor información.
Planeación de la maternidad y fertilidad
La fertilidad disminuye con la edad, y a pesar de que las mujeres puedan ser más saludables y conscientes de su salud, esto no contrarresta el cambio en el número de óvulos. Esto puede ocurrir mucho antes de lo que la mayoría de las mujeres esperan.
Cada mujer nace con aproximadamente un millón de óvulos; en la pubertad, esa cifra disminuye a casi 300 mil; luego de la primera menstruación este número sigue decayendo, de modo que solamente 300 óvulos serán liberados durante los años reproductivos. Sin embargo, gracias a los avances en la ciencia en los Tratamientos de Reproducción Asistida, es posible un panorama mucho más amable, en el que la fertilidad es concebida como un aspecto importante en el proyecto de vida, pero que también puede planearse para el futuro.
Como resultado, miles de mujeres en el mundo han podido pensar la idea de la maternidad a futuro sin arriesgar otro tipo de proyectos, como la culminación de su educación, el desarrollo profesional, la culminación de sus viajes y demás aspiraciones asociadas.
Planear la maternidad y la fertilidad se materializa en diversas opciones, una de ella, la congelación de óvulos, una técnica de preservación de la fertilidad femenina, mediante la cual se extraen los óvulos de una mujer (ovocitos), se congelan y se almacenan.
La congelación de óvulos permite a la mujer almacenar sus óvulos para su uso futuro, incluso después de los 35 años. De esta forma, es posible que las mujeres puedan preservar su potencial reproductivo para el momento indicado en que quieran ser madres, ya sea por decisión propia o porque presenten alguna condición médica que las impulse a hacerlo.
Rompiendo estigmas y desmintiendo mitos
Muchos mitos rodean la posibilidad de conseguir un embarazo, algunos de ellos están arraigados a la cultura y se han transferido por tradición oral de generación en generación, otros son producto de la ciencia ficción, de la imaginación o de la capacidad de la sociedad para viralizar información.
Lo cierto es que la ciencia puede darnos claridad y desmitificar los mitos más comunes en relación con la infertilidad. No obstante, lo más importante es consultar a un especialista ante cualquier duda.
Algunos de estos mitos son:
- La infertilidad es cuestión de mujeres: FALSO. La infertilidad afecta aproximadamente al 12% de las parejas en edad reproductiva, y no es un problema que impacte únicamente a las mujeres. De hecho, en un 50% de los casos, el hombre puede ser la causa única o contribuye a la infertilidad.
- Cuantas más relaciones sexuales, más posibilidades de embarazo: FALSO. En primer lugar, no importa la cantidad, sino que la relación sexual se dé en el umbral de ovulación femenino y que las condiciones del semen y el óvulo sean las adecuadas para la fecundación. Es cierto que una mayor frecuencia de relaciones sexuales abrirá el campo de probabilidades, pero no es una garantía. Por este motivo, es importante tener presente el ciclo menstrual, fechas de ovulación y tiempos.
- Los hombres pueden tener hijos a cualquier edad: FALSO. Aunque no son tan bruscos ni evidentes como los cambios en las mujeres, los cambios en la fertilidad y la función sexual también se producen en los hombres a medida que envejecen. Existe un riesgo ligeramente mayor de presentar defectos genéticos derivados de la calidad de los espermatozoides. Por otra parte, diferentes estudios han encontrado que la fertilidad se puede ver disminuida en los hombres a partir de los 40 años.
- La culpa es del estrés y la ansiedad: FALSO. Si bien el estrés y la ansiedad pueden jugar un papel clave en el estado anímico, la fertilidad depende de la capacidad biológica y física.
- Las mujeres pueden tener hijos hasta la menopausia: FALSO. Cuando inician los 30 y sobre todo después de los 35, la posibilidad de quedar embarazada se reduce a un 20%. A los 40 años disminuye aún más, y la probabilidad de quedar embarazada es inferior al 5%.
- Las parejas que ya tuvieron hijos no son infértiles: FALSO. Un 11% de las parejas que ya tienen un primer hijo pueden enfrentarse a problemas de infertilidad secundaria, es decir, dificultades para concebir un segundo embarazo.
- Tener la menstruación es símbolo de fertilidad: FALSO. Que la menstruación esté presente de manera periódica no significa que el ciclo sea ovulatorio, es decir, que un óvulo esté disponible para ser fecundado.
- Un hombre que eyacula es un hombre fértil: FALSO. El hecho que los hombres eyaculen no quiere decir que sean fértiles, que su semen contenga espermatozoides o que estos funcionen correctamente. Los hombres pueden tener un bajo número de estas células, baja movilidad, mala calidad o ausencia de ellas y seguir eyaculando sin problema.
- Determinadas posturas sexuales favorecen la posibilidad de quedar embarazada: FALSO. Se cree que hay ciertas posiciones que favorecen la llegada de espermatozoides al óvulo tras la eyaculación; no obstante, no existen estudios que soporten estas teorías. De hecho, se ha demostrado que los espermatozoides sanos tienen su propia movilidad, que les permite llegar al óvulo.