Washington.- Una vez se posesionó como presidente de Estados Unidos, Joe Biden anunció que ese país regresa a la Organización Mundial de la Salud y se comprometió a respaldar su estrategia para hacer frente a la pandemia, en un momento en que la variante británica del coronavirus ya afecta a al menos 60 países y la vacunación llega poco a poco a nuevos territorios.
“Estados Unidos está dispuesto a trabajar en colaboración y solidariamente para apoyar la respuesta internacional al Covid-19, atenuar su impacto en el mundo, reforzar nuestras instituciones, hacer que avance la preparación ante futuras epidemias y mejorar la salud y el bienestar de todos los pueblos del mundo”, dijo el inmunólogo Anthony Fauci, que formaba parte de la célula de crisis durante el mandato de Trump y fue nombrado consejero por Biden, durante una reunión de la OMS celebrada este jueves.
De esta manera Biden desestimó la posición que había asumido su antecesor Donald Trump, que acusó a la organización de ser una “marioneta” en manos de China y de realizar una “mala gestión” de la pandemia, antes de retirar a su país de la institución en julio.
El miércoles, el número de muertos por Covid-19 en Estados Unidos superó el de soldados estadounidenses fallecidos durante la Segunda Guerra Mundial. La pandemia ha dejado ya 405,500 decesos en el país, el más enlutado del mundo.
“Estamos entrando en la que quizás sea la fase más dura y mortífera del virus”, advirtió Biden el miércoles.
Además de ordenar el retorno de Estados Unidos a la OMS, Biden decretó, nada más ser investido, el uso obligatorio de tapabocas en los edificios federales y los transportes interestatales y por parte de los empleados del gobierno central.
Situación caótica en Manaos
En todo el mundo, el virus se ha cobrado ya al menos 2.07 millones de vidas y las autoridades están alarmadas ante la aparición de las nuevas variantes del virus surgidas en el Reino Unido, Sudáfrica y Brasil, debido a su mayor capacidad de infección.
La cepa británica ya ha llegado al menos a 60 naciones, según la OMS, mientras que la sudafricana ha sido detectada en 23 países y territorios.
La OMS también dijo que está vigilando la propagación de otras dos variantes que aparecieron en Brasil, entre ellas la registrada en la región de Amazonas.
En los hospitales de Manaos, capital de este estado brasileño, la situación es caótica y el servicio de urgencias de la ciudad asegura recibir unas 1,300 llamadas por día, 80% de ellas por problemas respiratorios.
Brasil es el segundo país del mundo más castigado por la pandemia, con 212,831 muertos y 8.6 millones de infecciones.
Texto tomado de AFP