Bucaramanga.- A la evidente crisis que afronta el Hospital Universitario de Santander (HUS) se sumó recientemente un cese de actividades de los médicos que hacen su internado en la institución y que si bien ya fue superado, devela la problemática que padece el centro asistencial más importante del Oriente Colombiano, dentro de la red pública.
Los profesionales se quejaron que la carga de trabajo es excesiva, por cuanto tienen que cubrir las horas del personal médico de planta, del que carece actualmente el centro asistencial. Sin embargo, este no es el primer cese de actividades en las que médicos, enfermeras y trabajadores del Hospital organizan para exigir el pago de sus salarios. (Ver nota: paro de trabajadores del HUS)
El Universitario, una entidad de tercer nivel de atención que mes a mes, factura una suma cercana a los 11 mil millones de pesos, tiene una cartera en mora por parte de las Entidades Promotoras de Salud (EPS), de alrededor de “139 mil millones”, según Orlando Quintero, gerente (e) del HUS y quien señala que mensualmente reciben de las EPS, entre $3.000 y $5.000 millones.
“Eso quiere decir que si estamos recibiendo entre tres mil y cinco mil y las cuentas de nuestros proveedores y colaboradores están entre ocho mil y nueve mil, pues ahí se está generando un hueco muy grande”, dijo. Y la suma total de dichas acreencias, a 31 de diciembre de 2015, fueron de más de 40 mil millones.
EPS liquidadas como Solsalud y Caprecom, le adeudan entre 16 y 23 mil millones respectivamente, lo que significa que ese dinero ya no puede contarse entre las arcas del HUS, pues es una deuda que difícilmente podrá ser pagada. No obstante se espera que los 70 mil millones restantes que tienen todos los soportes sea recuperable, eso sí de acuerdo al flujo de recursos que tengan las EPS deudoras.
En un conversatorio titulado Retos y Perspectivas del HUS, que se celebró el viernes pasado en el auditorio Fundadores de la Universidad Industrial de Santander (UIS) Fabio Bolívar Grimaldos, decano de la Facultad de Salud de dicha institución educativa, dijo que el Nuevo Modelo de Atención Integral de Salud “es una amenaza para el sector público”. Pero a esto se suma, la cercana elección del nuevo gerente, pues muchos coinciden en que quienes se postulan no tienen la formación suficiente para dirigir y sacar de la crisis a este centro asistencial con una capacidad de urgencias de 110 camas, pero que en ocasiones sobrepasa las 170.
“Para ser un hospital universitario, tiene que ser de verdad, un hospital universitario y es que en eso es donde estamos perdiendo el sector público todas las posibilidades, porque es que la Facultad de Salud, sin hospital Universitario no va a poder seguir estando a la vanguardia de la educación, de la formación y mucho menos de la investigación y extensión”, explicó Bolívar Grimaldos.
Destacó que en la ley de hospitales universitarios se les obliga a estar acreditados y que a primero de enero del año en curso, debían tener tal certificación o de lo contrario, pueden perder la estampilla pro Hospital, lo que significaría un ingreso menos para el centro asistencial.
Fabio Bolívar también dijo que “El hospital con los problemas externos e internos, no aguanta una administración si el gerente no tiene de verdad un perfil gerencial para el hospital y universitario para los procesos de investigación y formación. A mí me parece que es gravísimo”, dijo. Señaló también que “con el problema de unos contratos arquitectónicos que llevan un retraso (…) vamos a seguir sacando cohortes en obra negra, trabajando en los escombros, trabajando entre el tierrero, con unas urgencias complicadas no solo por los pacientes en cantidades que llegan, sino por las condiciones físicas del Hospital que todavía está en obras”.
El doctor Sigifredo Fonseca, representante del estamento científico de la ESE – HUS, dijo que el proceso de elección del gerente debería darse desde la junta directiva con todos los requisitos y parámetros, pero la propuesta de la más reciente reunión fue que dicho proceso debería ser jalonado por la Secretaría de Salud con un componente fundamental y es “que la persona que se presente al Hospital Universitario se presenta porque tiene los requisitos y las condiciones para ser gerente del Hospital Universitario de Santander y no del Hospital Regional de Vélez”. Los requisitos están contemplados en la ley: experiencia, preparación, especialización en áreas administrativas de salud, como también que no existan antecedentes penales o de otro tipo ante Procuraduría y Contraloría.
Otro de los temas planteados, fue hacer una reasignación del salario del gerente, pues en la actualidad el pago mensual es de $10.000.000 que no es apetecible, según Sigifredo Fonseca. Dicho incremento en el salario permitiría “buscar súper gerentes, con una formación, una experiencia y una preparación académica ideal. Hoy por hoy, tenemos el proceso en marcha, lo inició la Gobernación”.
En la reflexión sobre el HUS también se hizo mención de la poca voluntad política para sacar al Universitario de la crisis en la que se encuentra. Es de destacar que en el área metropolitana funcionan dos de las instituciones de salud privadas más sólidas de Colombia: La FOSCAL y la Fundación Cardiovascular, en la que prestan los servicios las mismas EPS que le adeudan al HUS, pero también se resaltó que uno de los dueños de dichos centros asistenciales apoyó la campaña de Holger Díaz, quien fuera candidato a la Gobernación de Santander y que se encuentra investigado por enriquecimiento ilícito dentro del caso Salud Coop.
De igual manera, dijeron que la Unidad Oncológica del HUS presenta graves dificultades y su competencia directa es el Centro Internacional de Cáncer, que dicho sea de paso, recibió el apoyo estatal porque es un préstamo de FINDETER, en tanto que el Hospital público no recibe el mismo apoyo, e incluso dicho centro fue inaugurado con la presencia del presidente de la República Juan Manuel Santos.
Resaltaron también que compiten con una zona franca de salud y que adicional a ello para estas dos instituciones la compra de equipos está libre de impuestos, en tanto que para el Hospital tiene un sobrecosto. Y que esto es evidencia clara de que el Gobierno quiere la privatización de la salud.