En 1989 nació el Instituto Colombiano de Medicina Tropical Antonio Roldán Betancur (ICMT), con el apoyo de sus actuales socios la Universidad CES y la otrora Dirección Seccional de Salud de Antioquia (hoy Secretaría Seccional de Salud), y desde entonces se ha consolidado como centro de excelencia en investigación, de acuerdo con la clasificación de Colciencias, Grupo A1.
En estas tres décadas, que se celebrarán este jueves, el ICMT ha enfocado su labor a la Investigación básica y aplicada, la prestación de servicios, la consultoría y la asesoría en el sector salud del país y de Latinoamérica.
“El Instituto ha contribuido a mejorar la calidad de vida de las comunidades más vulnerables del país, mediante la producción de conocimiento científico y su transferencia en forma de estrategias de intervención, pruebas diagnósticas y protocolos de control, atención y tratamiento de enfermedades tropicales”, afirmó Luis Ernesto López Rojas, director del ICMT.
El trabajo de los investigadores permitió que el Instituto recibiera en 2018 el premio ‘Medellín Investiga’ por el desarrollo del Inmunotropic, un estuche que facilita el diagnóstico etiológico en forma sensible y específica de las infecciones causantes de síndrome febril, producido por agentes infecciosos como salmonella, brucella, leptospira y parásitos tisulares.
Asimismo, el ICMT a lo largo de sus 30 años ha efectuado más de 300 estudios y a partir de éstos se han publicado alrededor de 400 artículos sobre la biología y epidemiología de los agentes infecciosos y sus vectores, responsables de enfermedades como lepra, salomonelosis, leptospirosis, malaria, leishmaniasis y chagas, entre otras. También acerca de la caracterización de las poblaciones humanas más vulnerables.
Es así que el Instituto se ha convertido en un referente para el estudio, diagnóstico y tratamiento de estas patologías en Colombia.
Es de anotar que el ICMT tiene dos sedes, la principal está en las instalaciones de la Universidad CES en el municipio de Sabaneta (sur del Valle de Aburrá) y otra en el municipio de Apartadó (Urabá antioqueño).
Allí se ofrecen servicios de vacunación, consulta médica especializada y laboratorio clínico especializado para el diagnóstico de la enfermedad de Hansen o lepra, brucelosis, salmonelosis, leptospirosis, leishmaniosis, enfermedad de chagas y algunas arbovirosis, donde se utilizan métodos clínicos, moleculares y serológicos.
Igualmente, cuenta con el laboratorio clínico veterinario registrado ante el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), en el que se da asesoría en la interpretación de resultados y acompañamiento en proyectos investigativos.
Posee una moderna planta para la producción de insumos y reactivos de diagnóstico in vitro y productos biológicos.
De la misma forma, tiene un laboratorio de microbiología industrial para la prestación de servicios de análisis microbiológico de productos terminados, materias primas y empaques, ambientes, superficies y manipuladores, agua potable, pruebas de eficacia, reto o poder antimicrobiano (bactericida y fungicida) de desinfectantes, antisépticos y conservantes.
El ICMT es además, un centro de rotación académica para estudiantes y profesionales, nacionales y extranjeros de diferentes áreas de la salud.