Hoy se conocieron dos anuncios respecto a la posibilidad de contar antes de finalizar este año, con varias vacunas contra el coronavirus, las cuales vienen desarrollándose por distintos países.
Por un lado, el mandatario ruso, Vladimir Putin anunció que ya tiene una vacuna aprobada y registrada contra el virus y que la vacuna -bautizada como Sputnik-V- fue desarrollada por el Instituto Gamaleya y fue registrada después de dos meses de ensayos en humanos.
De hecho la semana pasada, el gobierno ruso anunció que estaba preparando el inicio de una vacunación masiva después los exitosos ensayos de la vacuna, una noticia que fue recibida con escepticismo por la comunidad internacional.
Tal como señala la agencia Reuters, los trabajadores de salud rusos que están tratando a pacientes de coronavirus tendrán la oportunidad de presentarse como voluntarios para la tercera fase de ensayos de la vacuna.
Sin embargo la Organización Mundial de la Salud (OMS) recibió con cautela la noticia, señalando que ésta, como el resto, deberán seguir los trámites de precalificación y revisión que marca el organismo.
“Acelerar los progresos no debe significar comprometer la seguridad”, señaló en rueda de prensa el portavoz de la OMS Tarik Jasarevic, quien añadió que la organización está en contacto con las autoridades rusas y de otros países para analizar los progresos de las distintas investigaciones de vacunas.
Igualmente, otros expertos han expresado dudas por la velocidad con que se está desarrollando la vacuna rusa, y se ha sugerido que los investigadores podrían estar economizando esfuerzos.
Pero durante su anuncio, Putin señaló que la vacuna rusa “es un paso muy importante para el mundo” y agradeció a los científicos involucrados en su desarrollo.
Y agregó: “Sé que (la vacuna) funciona de forma bastante efectiva, produce una fuerte inmunidad y, repito, ya pasó todas las revisiones necesarias” y el ministro de Salud ruso, Mikhail Murashko, indicó que la vacuna había “demostrado ser altamente efectiva y segura”, y la describió como un gran paso hacia “la victoria de la humanidad” contra covid-19.
En Argentina y Brasil
Por otra parte también hoy el gobierno de Argentina anunció que en ese país se producirá una vacuna contra el coronavirus, la del laboratorio AstraZeneca, investigada por equipos científicos de la Universidad de Oxford y cuyo ciclo –aún en fase 3– no está terminado.
El presidente argentino Alberto Fernández adelantó que estará lista para ser utilizada en el primer semestre de 2021 y que su costo será de entre 3 y 4 dólares. Además, dijo que el objetivo es fabricar, en conjunto con México, entre 250 y 350 millones de dosis para ser distribuidas en toda América Latina pero con una salvedad: Brasil.
El jefe de Estado comunicó que “AstraZeneca eligió al laboratorio mAbxience, que será el productor del reactivo de la vacuna”, lo cual consideró “un reconocimiento a la calidad de los laboratorios argentinos”.
“México será el encargado de envasar la vacuna y completar el proceso de producción”, explicó el Presidente. Y agregó: “Nos han anunciado que esperan poder llevar adelante una producción con un piso de 150 y un techo de 250 millones de dosis, calculando que América Latina va a necesitar cerca de 230 millones de dosis, sin contar a Brasil, que tiene un acuerdo con otro desarrollo”.
El motivo de la excepción de Brasil radica justamente en que el país vecino es otro de los que también producirá la vacuna de Oxford contra el Covid-19. Así lo anunció el sábado pasado, cuando comunicó que espera comenzar la producción masiva en diciembre.
Según se informó, BioManguinhos, el instituto de producción de inmunobiológicos de la Fundación Oswaldo Cruz, principal centro de investigación médica de Latinoamérica, envasará, rotulará y empacará las primeras dosis. Luego, en una segunda etapa, elaborará el concentrado vírico.
De las cien millones de dosis adquiridas por Brasil, se tiene previsto que en diciembre lleguen 15,2 millones en enero y otra cantidad igual en enero. Para las casi 70 millones de dosis restantes “estamos definiendo el cronograma” con el laboratorio AstraZeneca, resaltó Zuma, para quien las primeras vacunas solo estarán disponibles para las personas a partir de enero.
La vacuna contra el coronavirus que desarrolla la universidad británica de Oxford resultó “segura” y “entrena” el sistema inmunológico, según revelaron los hallazgos de las primeras fases del estudio, divulgados en los últimos días de julio.
AstraZeneca es una de las farmacéuticas líderes en la carrera por encontrar una vacuna contra la enfermedad que ya causó miles de muertes en el mundo, junto con otras compañías que prueban candidatas en ensayos clínicos de etapas media y final. La firma dijo que una fase III de los ensayos de su vacuna potencial se está llevando a cabo actualmente en Reino Unido, Brasil y Sudáfrica, y que empezará pronto en Estados Unidos.
Vale decir que la vacuna rusa no está en la lista de las seis vacunas de la OMS que ya alcanzaron la fase tres de los ensayos clínicos, los cuales involucran un número más amplio de pruebas en humanos.
Según la OMS, actualmente hay más de 100 vacunas potenciales contra covid-19 que se están desarrollando alrededor del mundo.
A pesar del rápido progreso, la mayoría de los expertos piensan que hasta mediados del 2021 se podrá contar con una vacuna disponible en el mundo.