Luego de que la semana pasada la organización social Pacientes Colombia cuestionara en redes sociales los procesos que desarrolla la Superintendencia Nacional de Salud para contratar a los agentes interventores que representan a la entidad en las entidades del sector salud sometidas a vigilancia especial, el superintendente Fabrio Aristizábal Ángel se desplazó a Montería a presidir la mesa interinsitucional de seguimiento a los resultados de la intervención forzosa administrativa del Hospital San Jerónimo de Montería.
Durante el encuentro en el que participaron el Contralor Delegado para el sector Social y representantes de la Gobernación, de la Alcaldía de Montería, la Contraloría Departamental, la Defensoría del Pueblo, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), la Agencia de Desarrollo Rural (ADR) y la Corporación Valle del Sinú, el Agente Especial Interventor, Rubén Darío Trejos Castrillón, informó que la entidad ya logró una disminución de 8.000 millones de pesos en sus pasivos, pasando de 55.000 millones de pesos a 47.000 millones de pesos en el mes de agosto y que la facturación aumentó, pasando de 3.400 millones de pesos en febrero a más de 5.700 millones de pesos en el mes de agosto.
En su balance, la interventoría también destacó la adquisición de una ambulancia medicalizada por 180 millones de pesos, financiada por el ministerio de Salud y recursos del Hospital y la remodelación de la farmacia, las salas de parto y que ya inició el proceso de mejoramiento para el servicio de imagenología, un auditorio nuevo con una capacidad para 200 personas y que se contará con 38 camas nuevas para hospiltalización, para un total de 232 camas.
Destacó el incremento de la facturación, la remodelación del banco de sangre, de seis quirófanos y la próxima reapertura de la unidad de cuidados intensivos, al igual que el compromiso de los colaboradores del Hospital, los aportes de la Gobernación por 11.000 millones de pesos para la remodelación del centro asistencial y los esfuerzos del equipo interventor para superar las fallas financieras, administrativas y jurídicas, que fueron detectadas antes de la intervención forzosa.
La semana pasada Pacientes Colombia le requirió al Supersalud una explicación sobre el monto del salario del agente interventor del hospital San Jerónimo de Montería que está por el orden de los 42’700.000 pesos mensuales, el cual consideran exageradamente elevado teniendo en cuenta que dicho salario sale de las arcas del Estado. Además precisaron que los montos de estos salarios fueron estipulados de manera “arbitraria” por la Superintendencia de Salud.